DATOS PRÁCTICOS

¿CÓMO ENCENDER EL CARBÓN?

carbón encendido

Materiales Necesarios:

  • Papel de diario arrugado (preferiblemente sin tintas de colores).
  • Pedazos de madera delgada, como las tablas de cajas de embalaje de frutas.
  • Carbón de buena calidad (recomendado en trozos uniformes)

Preparación:

  • Forma una base en el centro de la parrilla con el papel de diario arrugado. Asegúrate de dejar espacio para que el aire circule.
  • Sobre el papel, coloca pequeños trozos de madera delgada en forma de pirámide para facilitar la propagación del fuego.

Añade el Carbón:

  • Rodea la pirámide con el carbón, distribuyéndolo de manera uniforme, pero sin sofocar el papel o la madera.

Encendido:

  • Enciende el papel de diario desde varios puntos. Este fuego inicial prenderá la madera y, a su vez, encenderá el carbón.

Evita Combustibles Químicos:

  • No utilices líquidos inflamables como queroseno o alcohol, ya que estos contaminan el metal de la parrilla y afectan el sabor de los alimentos.

Paciencia y Observación:

  • Deja que el carbón tome bien el fuego. Notarás que está listo cuando tenga un color grisáceo o blanco en su superficie, lo que indica que está en su punto ideal para asar.

Distribución de las Brasas:

  • Cuando las brasas estén listas, distribúyelas según el tipo de cocción que necesites: una capa más densa para mayor calor directo o más dispersa para una cocción lenta.

Seguridad:

  • Asegúrate de tener agua o arena cerca en caso de emergencias. Evita encender el carbón en espacios cerrados o mal ventilados.
  • Siguiendo estos pasos, podrás encender tu parrilla de manera eficiente, obteniendo brasas perfectas para cocinar y garantizando un sabor limpio y delicioso en tus alimentos.

PREPARANDO UN BUEN ASADO

buen asado

Existen innumerables consejos para preparar un buen asado, pero al igual que en el fútbol, cada jugador tiene sus cualidades, y son ellas las que definen el resultado. En el caso del parrillero, ocurre lo mismo. El éxito de un buen asado depende de las habilidades únicas de quien lo prepara. Con el tiempo, el asador aprende de la experiencia, ya sea en el tiempo de cocción, el momento exacto para salar la carne, la altura de la parrilla en relación a las brasas, o la intensidad del calor según el tamaño del corte que se vaya a cocinar. Un principio fundamental en todos los consejos es no enmascarar el sabor de la carne con salsas o aliños. La mejor forma de condimentar es con sal, aplicada un rato antes de comenzar a servir. Al igual que aprender a caminar, bailar o conducir, los tropiezos y fracasos forman parte del proceso de aprendizaje y de la mejora constante.

Consejos para un buen asado:

  1. La carne: Siempre elige cortes de buena calidad. Los cortes más populares para un asado son el asado de tira, la entraña, el vacío y el lomo vetado. La carne debe estar a temperatura ambiente antes de ponerla en la parrilla, así se cocina de manera más uniforme.

  2. La parrilla: Mantén la parrilla limpia y, si es posible, utiliza leña o carbón de buena calidad. Asegúrate de que las brasas estén bien formadas antes de empezar. No pongas la carne sobre el fuego directo, ya que eso puede quemarla. La idea es tener un calor indirecto, con brasas bien distribuidas.

  3. El tiempo de cocción: La carne debe cocerse lentamente para obtener una textura tierna y jugosa. Dependiendo del grosor del corte, ten paciencia y evita darla vuelta constantemente.

  4. Salado adecuado: La sal es clave. La mejor práctica es salar la carne unos 10 a 15 minutos antes de colocarla sobre las brasas. Esto permite que la sal penetre y realce el sabor sin que la carne se deshidrate.

  5. Temperatura: Evita cocinar a temperatura demasiado alta o baja. Un fuego fuerte puede quemar la carne por fuera y dejarla cruda por dentro. Una parrilla con brasas medianas es ideal para que se cocine bien por dentro y por fuera.

  6. No sobrecargar la parrilla: Si tienes mucha carne, hazlo en etapas. Colocar demasiada carne en la parrilla a la vez puede enfriar las brasas y afectar la cocción.

  7. El descanso de la carne: Una vez que la carne esté lista, déjala reposar unos minutos antes de cortarla. Esto permite que los jugos se redistribuyan y la carne quede más jugosa.

  8. La compañía: El asado no es solo sobre la carne, sino también sobre disfrutarlo en buena compañía. ¡Prepara una buena conversación y acompaña con bebidas refrescantes!

Con práctica y paciencia, mejorarás cada vez más en el arte del asado.

CÓMO HACER UN ASADO A LEÑA

Para lograr un auténtico asado rioplatense, especialmente en nuestras parrillas Cuperfi a la leña, es fundamental utilizar leñas duras, como el espino. Este tipo de leña genera un fuego lento y constante, ideal para una cocción perfecta.

El proceso de encendido debe hacerse con astillas o pedazos de tabla de madera delgada, mezclados con troncos delgados de espino. Esta mezcla asegura un encendido más rápido y efectivo, evitando el uso de combustibles adicionales.

Es importante tener en cuenta que este proceso requiere paciencia. Lograr que la leña se transforme en brasas adecuadas puede tardar hasta dos horas. Es esencial esperar este tiempo para que las brasas estén listas antes de colocar la carne sobre la parrilla.

El resultado final, aunque más lento, es increíblemente satisfactorio. La carne se impregna del sabor único de la leña, lo que enriquece su aroma y le da un toque especial. Además, la cocción lenta permite que los jugos naturales de la carne se conserven, logrando una textura más tierna y sabrosa.

Consejos adicionales para un buen asado a leña:

  1. Selecciona bien la leña: Utiliza leña de árboles frutales o maderas duras como el espino, el roble o el quebracho. Estas leñas son ideales para el asado porque generan brasas duraderas y de alta calidad.

  2. Preparación de las brasas: Asegúrate de que las brasas estén bien formadas y distribuidas antes de colocar la carne. El calor debe ser constante, sin llamaradas.

  3. Controla la temperatura: A medida que las brasas se van formando, ajusta la altura de la parrilla para controlar el calor. Evita el fuego directo para no quemar la carne.

  4. Cocción lenta: Aprovecha la cocción lenta de la leña para hacer una parrillada que conserve sus jugos. La paciencia es clave para que la carne quede tierna y sabrosa.

  5. Aprovecha el sabor ahumado: A medida que la carne se cocina, se impregnará del sabor ahumado de la leña, lo que la hará aún más deliciosa.

Si bien el proceso requiere tiempo y atención, el sabor único de un buen asado a leña es incomparable.

CÓMO MANTENER LA PARILLA

Las parrillas Cuperfi están fabricadas en acero inoxidable de alta calidad, lo que facilita su mantenimiento. Además, la mayoría de nuestros modelos son desmontables, lo que permite un aseo fácil y efectivo. Puedes desmontar las piezas y lavarlas en la cocina junto con los demás utensilios, utilizando un detergente antigrasa y agua caliente. De esta manera, las parrillas quedarán como nuevas, listas para el siguiente asado.

Es importante no utilizar las parrillas de asado como chimeneas a leña. Con el tiempo, la grasa acumulada en la campana y en los ductos de tiraje puede convertirse en un peligro, ya que, al prenderse, podría causar un incendio. Por ello, es fundamental mantener estas áreas limpias para evitar riesgos.

Consejos para la limpieza y mantenimiento de tu parrilla:

  1. Limpieza regular: Después de cada asado, asegúrate de limpiar la parrilla. Deja que las brasas se enfríen y retíralas, luego usa una espátula o un cepillo de alambre para eliminar los restos de grasa y comida pegada. Limpia las superficies con un trapo húmedo y un detergente antigrasa adecuado.

  2. Desmontaje: Aprovecha el diseño desmontable de las parrillas Cuperfi para facilitar la limpieza completa. Desmonta las piezas para poder lavarlas con agua caliente y detergente. Esto asegurará que no queden residuos de grasa o suciedad que puedan afectar el sabor de los próximos asados.

  3. Evita el uso incorrecto: Como mencionamos, no uses tu parrilla como una chimenea a leña. La acumulación de grasa en las zonas de tiro puede ser peligrosa, especialmente cuando no se realiza un mantenimiento adecuado.

  4. Revisión anual: A pesar de la limpieza regular, es recomendable hacer una revisión y mantenimiento interior de la parrilla al menos una vez al año. Esto incluye limpiar los ductos de tiraje, la campana y otras áreas difíciles de acceder que pueden acumular grasa.

  5. Protección externa: Para mantener el acero inoxidable en buen estado y evitar que se oxide, puedes aplicar un producto específico para limpiar y proteger superficies de acero inoxidable, lo que también ayuda a conservar su apariencia brillante.

Con estos cuidados, tu parrilla Cuperfi no solo funcionará de manera óptima, sino que también durará mucho más tiempo, permitiéndote disfrutar de muchos asados perfectos.